Binomio Perfecto

El canicross, disciplina en la que una persona y un perro corren unidos por una línea de tiro amortiguador, arnés y cinturón, aparece como una nueva tendencia para hacer deporte, divertirse y, ante todo, fortalecer la relación con las mascotas.

El binomio hombre-perro debe funcionar mejor que cualquier operación matemática.Es cuestión de inteligencia, estrategia y mucho entendimiento. La regla de oro es el trabajo en equipo: que ninguno de los dos corra más de la cuenta, desgastando al otro, y que se den los comandos —“¡derecha!”, “¡izquierda!”, “¡acelerar!”, “¡parar!”— en el momento adecuado. 

Más que ganar, lo importante es hacer ejercicio, que todos se diviertan y no se queden encerrados en la casa. Eso lo tiene bien claro Rodrigo López, director del equipo Canicross de Colombia, uno de los promotores de este deporte que cada vez se populariza más en el país. Rodrigo, por ejemplo, ya ajusta tres años corriendo con Jazz Antonio, un criollo que llegó a su casa un mes después de la muerte de Zasha, la Husky con la que él se inició en la disciplina hace seis años. Nunca han faltado las ganas ni la energía. Entre semana salen a correr por las mañanas y los sábados entrenan durante una hora y media o dos horas como preámbulo del domingo, día sagrado para los amantes del canicross. 

La cita es por la mañana en el Parque Simón Bolívar. Primero, los 30 o 40 binomios que usualmente participan en las sesiones socializan. Luego, estiran, entran en calor, trotan y palpan los músculos y patas de los perros hasta que llega la hora decisiva: se entrena velocidad, resistencia, potencia y relevos, entre otras modalidades que los dejan a todos con la lengua afuera antes de la recuperación final y la hidratación.

De esta manera, Jazz Antonio y muchos otros canes se preparan para la próxima gran cita: el campeonato de relevos, del 23 al 26 de noviembre. Mientras tanto, los cachorros menores de un año como Champeta María —adoptada por Rodrigo en febrero— aguardan: dentro de poco serán ellos los que estarán en la línea de arranque y sentirán la adrenalina del deporte. 

Mejor ejercicio, más salud 

Faltaban 100 metros para terminar la carrera. Marco Álvarez desfallecía, tras correr 4,9 kilómetros. Pero, de repente, Mike, un Border Collie, sacó fuerzas de donde no las había y como si fuera un sprinter del ciclismo, desde atrás, a pura velocidad, superó a otros contendientes y se consagró en la meta. “Fue una felicidad indescriptible”, comenta Marco, deportólogo de profesión, al recordar aquel episodio en Suesca hace cuatro años. El canicross deja grandes emociones y recuerdos de una amistad que se va consolidando con el paso de los kilómetros. Y detrás vienen los beneficios físicos: “la persona refuerza su capacidad aeróbica, resistencia y potencia de las piernas, el core, los abdominales, los brazos, la espalda y los músculos de la cadera”, comenta Marco. Los perros tienen más suerte: al correr en cuatro patas refuerzan y potencian todos sus grupos musculares; por otro lado, al hacer ejercicio, son más sociables y menos propensos a la obesidad, problemas cardiacos y ansiedad. Por lo pronto, Marco sigue juicioso, madrugando los martes a las cinco de la mañana para correr con Mike unos cuatro o cinco kilómetros en los alrededores del parque Santa Helena. No hay mejor alternativa si quiere seguir en forma y responder a los retos de las sesiones grupales de los jueves por la noche y, cómo no , los domingos.

PARA TENER EN CUENTA

▶ Los perros deben pasar por un chequeo veterinario que compruebe su estado físico.

▶ Como sucede con los humanos, la exigencia debe ser progresiva. De repente, las mascotas no pueden correr 20 kilómetros.

▶ Se recomienda la práctica con canes mayores a un año.

▶ Casi todas las razas pueden practicar canicross. No es tan apropiado para perros chatos (Bulldog Inglés, Pug y Bóxer, entre otros), con los que es necesario tener cuidado especial y muchas precauciones con su condición respiratoria.

▶ No participar con perros en celo.

▶ Si la mascota es agresiva, debe usar bozal.

▶ Usar ropa cómoda.

▶ Comer poco en la previa del ejercicio.